Comenzamos cociendo unas almejas en su jugo, daremos calor, el justo, para que se abran. Es una buena costumbre abrir las almejas antes de incorporarlas al plato principal y evitaremos que una en malas o dicciones por tener fango o arena arruinen el preparado.
Comenzamos friendo unas lamas de ajo, cuando estas toman color,
añadimos las alcachofas cortadas en cuartos,
un breve salteado para atemperarlas, ya que las tendremos cocidas con anterioridad,
añadimos los guisantes, previamente cocidos,
Una vez integrado, este último ingrediente, añadimos las almejas con el jugo que han soltado.
Añadimos algo más de líquido, si hiciera falta.
Para engordar ligeramente el caldo añadimos un poco de maicena diluida en agua. Comprobamos si hiciera falta poner algo de sal, a veces, con el líquido de las almejas, puede ser suficiente.
Una breve cocción y cuando salsa y productos estén a nuestro gusto, tendremos el plato listo para sacarlo a la mesa.
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