martes, 6 de marzo de 2007

Hamburguesa de pollo al estilo oriental

Esta receta es, en mi modesta opinión, sana, nutritiva y exenta de grasas, por lo tanto buena para ingerirla por los que andamos vigilando al colesterol estrechamente.
Hace unos días dije que iba a poner una picadora, esta es la imagen de la misma, la fabricó la compañía Alesanderwerk/Remschid y creo que fue fabricada en la década de los años 20 del siglo pasado (XX), con esta no he picado el pollo, ya que la tengo como pieza de museo.


El primer paso es picar una pechuga de pollo, lo he hecho con esta otra maquina, que no es otra que el Robot Kenwood al que le he puesto el aparato auxiliar para picar carnes.
 A la carne ya picada le añadimos una cebolleta picada finamente, un ajo majado en el mortero y un trozo de raíz de corcuma rallada (Lo amarillo rojizo que se ve en el centro de la foto).
 También le añado dos cucharadas de salsa de soja, otras dos de vino seco de arroz , en su ausencia el Jerez le va bien y para una pechuga, 3 cucharadas de huevo batido, salpimentar al gusto, revolver bien todo el conjunto y añadirle algo de pan rallado para secar un poco la masa, aunque esta tiene que quedar húmeda, para que la hamburguesa resulte jugosa. Dejamos en maceración hasta la hora de dar forma a las hamburguesas.
 Guarnición para acompañar a las hamburguesas con aire oriental. Dispondremos de unas hojas de col china, unos brotes de soja, un champiñón en lamas y unas semillas de sésamo.
 Tostamos un poco las semillas de sésamo, cuando empiecen a soltar su fragancia, añadir un poco de aceite, a poder ser de sésamo, aunque en este caso ha sido oliva virgen extra,
 las verduras y una cucharada de salsa Hostin, en su defecto salsa de soja, salteamos hasta que las tengamos al dente. Sacar y reservar al calor de la lumbre.
 Formamos las hamburguesas con la ayuda de un aro, la harina que pongo en el plato es para que no se pegue el producto al plato o al aro. Con la ayuda de una espátula
 las pasamos a la sartén o a la plancha, al principio no muy caliente y las cocemos con poco aceite hasta que tomen un buen color y por dentro cocidas, pero jugosas.
 Sobre medio pan redondo, los llamados alcachofas, colocar una pieza y la guarnición a un lado.
Si gusta y apetece utilizar salsa de mostaza, a mi en este preparado no me gusta ya que va agradablemente especiado y con sabor que me recuerda a los guisos orientales. La salsa que se ve encima de las verduras es una de tomate aromatizada con curry.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Me encanta leerle y aprender. Estas hamburguesas tienen un aspecto imponente. Me parece que voy a probar a hacer hamburguesas de pollo, que no las he hecho nunca. Gracias

Apiciu dijo...

Hola Mercedes:
Gracias por su comentario.
Saludos

Anónimo dijo...

Hasta ahora nunca había escrito nada, pero me ha emocionado ver la máquina de picar que tienen mi madre y mi suegra, herencia de sus respectivas madres. En concreto, la máquina de mi madre se montó encima de un "mueble" hecho a mano que tiene cajones para guardar los accesorios.
Ellas lo usan hoy en día para picar la carne de la matanza del cerdo.
Gracias por mostrarlo en la red.
Un cordial saludo

Carlos Dube dijo...

Excelete y suculenta receta, preparado que encadilará a niños y abuelos, no digamos ya de su reportaje fotográfico (se nos hace la boca agua), y esa ancestral picadora que más que sacada de su museo parece sacada de un cuento. Le felicito Apicius. Como siempre fantástico.

Apiciu dijo...

Hola Dube:
Comentarios como el suyo me estimulan a seguir haciendo y publicando cosillas.
Gracias
Saludos

Apiciu dijo...

Hola Mª Ángeles:
Efectivamente estas maquinas o parecidas eran las utilizadas para picar la carne de cerdo y hacer los soberbios chorizos que se hacen por la geografía rural de la Piel de Toro.
¿Que sería de nosotros sin abuelas?. Sabríamos mucho menos de lo poco que sabemos, al menos yo.
Yo tengo tan buen recuerdo de La Abuela, solo conocí a una y ningún abuelo, que justo levantar la vista del teclado me encuentro con su fotografía, como me fue introduciendo en los distintos sabores y productos, aun recuerdo con 8 años ya comía remolacha roja en ensalada e infinidad de productos que hoy en día los niños ni los prueban. Poco a poco voy introduciendo nuevos sabores y productos en las comidas que hago todos los jueves para mis nietos y fines de semana, cuando no es temporada de nieve.
Bueno que me paso con cosas que creo no interesan a nadie.
Gracias por su comentario.
Saludos