Bacalao con pilpil con tomate

Esta es una preparacion, que se inicia con la ejecución de un pilpil clásico al que luego se le añade salsa de tomate, esta salsa suaviza el pilpil y no resulta tan graso.

Para oficiar el pilpil comenzamos sofriendo unos dientes de ajo para aromatizar el aceite de oliva virgen extra.

Una vez que la temperatura del aceite ha bajado alrededor de los 55º C, metemos los trozo de bacalao y los mantenemos a esta temperatura como mínimo 30 minutos, pero cuanto más se le deja, mejor se confitará el bacalao y mejor soltará su gelatina. 

En esta ocasión he mantenido el confitado por una hora y 30 minutos y después de este tiempo he acomodado el bacalao en la cazuela donde se iba a rematar el plato. 

Quito parte del aceite del confitado, se reserva, será el que utilizaremos para emulsionar el pilpil.

Con resto del aceite del confitado y la gelatina que ha soltado, la parte blancuzca que se ve en el fondo del puchero, 

Comenzamos el emulsionado con un batidor de alambre, 

vamos añadiendo poco a poco el aceite que tenemos en reserva y veremos como se nos va engordando el pilpil. La densidad del pilpil se obtiene con más o menos aceite. 

Una vez tenemos un pilpil bastante denso, añadimos salsa de tomate y batimos.

Una vez que tenemos nuestro pilpil al tomate, lo transferimos a la cazuela donde tenemos el bacalao y lo mantenemos a temperatura de servicio.
Como estaba oficiando esta preparacion en una sociedad gastronómica, se me paso el tomar la fotografía final de la cazuela, pero en esta tienen ustedes una ración del bacalao con pilpil al tomate.