Mollejas a la casera

Las mollejas de cordero o vacuno también son llamadas litiruelas, lechecillas , lechezuela, chapinas.
Como todos sabéis este producto procede de la glándula timo de los mamíferos (Vacuno y ovino), jóvenes y sobre todo de las hembras.
La primera operación que tenemos que hacer es lavarlas en agua fría a la que le habremos añadido un poco de sal y un chorreón de vinagre, las enjuagamos bien para que desaparezca toda la sangre a ser posible.

Posteriormente hay que quitarles una fina cutícula que las cubre, si no se hace esta operación, entonces hay que pincharlas para evitar que alguna explote debido a las bolsitas de vapor que se pueden formar. Una vez quitada la cutícula, las seleccionamos según el plato que vayamos a realizar, así que yo las he seleccionado para este plato las grandes y los trozos para freírlas.

 Empezamos esta preparación pochando cebolla, cuando la tenemos pochada, la apartamos al borde de la sartén, este borde lo tendremos fuera del foco de calor para que no se nos queme la cebolla.

 Freímos las mollejas hasta que tomen color.

 Unimos los dos elementos que tenemos en la sartén

 Añadimos vino blanco y cocemos durante unos minutos, rectificar de sal si hiciera falta.

 Como la presentación me gusta más en cazuela de barro, las he pasado a una y le he añadido 3 champiñones cortados en lamas.

 He espolvoreado la cazuela con una mezcla de ajo picado con perejil y pan rallado.

 La he pasado por 6 minutos al grill o hasta que la superficie tome color y ya las tenemos listas para degustarlas.