Melocotones asados sobre coulis de frutas del bosque

Para esta preparación me he inspirado en la preparación que publicó Carlos en su blog Vegetal..... y tal. 

Vamos a necesitar unos melocotones, que su superficie esté bien sana, tersos de carnes y no excesivamente maduros.

Los melocotones los lavamos con agua fría y no los pelamos.

También vamos a necesitar aceite de oliva virgen extra aromatizado a la vainilla. Para aromatizar el aceite, 100 CC.  lo calentamos a 60º C. y le añadimos las semillas de una vaina de vainilla (es la parte más aromática) y también añadiremos la vaina troceada. Dejamos en infusión por unos días en un lugar templado.

Pintamos los melocotones con el aceite al aroma de vainilla una vez colado para no que no tenga pepitas negras de la vainilla y encima ponemos un poco de azúcar morena. Los metemos al horno a 180º C.

Pasados 24 minutos ya tenia los melocotones blandos, una brocheta entraba suavemente. En este momento les pongo un poco de azúcar blanca para que se caramelice, por lo que subo el horno a 240º, hay que estar muy vigilante para que no se quemen.

Los melocotones ya listos, los dejo enfriar. El azúcar caramelizado debido a la humedad del melocotón, no quedara duro y al final tendrá la consistencia de un almíbar a punto de napa/hebra gruesa a la hora de la ingesta.
Como he dicho al principio estos melocotones iban a ir encima de un coulis de frutas del bosque, (moras, frambuesas, arándanos y uva espina, grosella blanca). 
Del coulis (no he tomado documento gráfico) pero es muy fácil de hacer, en una cazo ponemos el azúcar, agua y zumo de limón. Las cantidades azúcar y agua en la proporción 2x1 y el limón al gusto. Cocemos todo hasta que obtengamos un almíbar a punto de napa. 
Las frutas las machacamos y/o trituramos.
Cuando tengamos el almíbar listo, lo unimos a las frutas, a partes iguales, aunque ojo, si queremos un coulis algo menos dulce, disminuimos la cantidad de almíbar. Revolvemos bien y dejamos en reposo por unos minutos, pasamos todo por el fino si no queremos las pipas de las frutas y tendremos nuestro coulis  listo para ser utilizado. 
El coulis tiene que quedar de la consistencia de una papilla.

En la base de un plato de postre ponemos unas cucharadas del coulis y encima pondremos el melocotón.

En esta instantánea podemos ver los otros tres melocotones emplatados.

Una preparación interesante, ya que el aceite aromatizado a la vainilla le da a los melocotones un sabor muy particular.